¡Oye, Dios!, ante ti vengo
Para encomendarte mi sueño,
Mi alegría, mi deseo.
Pido:
‘’Cuida de este amor bonito,
Bendícelo y haz del mismo un
Sentimiento para siempre
Infinito.
Por eso sería capaz de ofrecerte
Mi vida, si así te sirve para que igual
Protejas a mi amada, te daría mi
Estrella guardiana para que se la des y
La acompañe donde quiera que vaya,
Hasta daría mi sonrisa y mi alma
Para hacerle sentir mi calor, mi paz, mi
Calma.
Señor,
¡Suplico tu ayuda por favor!
Quisiera ser para ella su valor,
Su fuerza y la fe que necesita para
Encarar al dolor.
Quisiera estar a su lado cada
Noche, así le velaría su sueño como
Un Ángel que la ame y la mime, no
La descuide y el rencor no la
Contamine.
Deseo volar con ella muy alto,
Allá donde el Sol ni una nube lo empañe,
La Luna de su brillo nos empape y tú,
Mi Dios, seas el único que por la senda nos
Guíe.
Pido que mi voz sea el cántico
Que estremezca su latir, mi mirada el
Espejo donde se refleje feliz, mi cuerpo
Su devoción, su musa, su inspiración.
¿Sabes?, la quiero cual destino,
La necesito cual aire que respiro, cual
Agua para saciar mi sed y también
Para embellecer mi vergel.
Déjame ser su virtud y su coraje,
Su pasión y su hombre, su verdad y
Aquel que nunca de tristeza la haga
Llorar. ’’
Te lo ruego, mi señor.
En el nombre del Padre, del
Hijo y del Espíritu Santo, amén.
Espero ser oído, me despido…
Para encomendarte mi sueño,
Mi alegría, mi deseo.
Pido:
‘’Cuida de este amor bonito,
Bendícelo y haz del mismo un
Sentimiento para siempre
Infinito.
Por eso sería capaz de ofrecerte
Mi vida, si así te sirve para que igual
Protejas a mi amada, te daría mi
Estrella guardiana para que se la des y
La acompañe donde quiera que vaya,
Hasta daría mi sonrisa y mi alma
Para hacerle sentir mi calor, mi paz, mi
Calma.
Señor,
¡Suplico tu ayuda por favor!
Quisiera ser para ella su valor,
Su fuerza y la fe que necesita para
Encarar al dolor.
Quisiera estar a su lado cada
Noche, así le velaría su sueño como
Un Ángel que la ame y la mime, no
La descuide y el rencor no la
Contamine.
Deseo volar con ella muy alto,
Allá donde el Sol ni una nube lo empañe,
La Luna de su brillo nos empape y tú,
Mi Dios, seas el único que por la senda nos
Guíe.
Pido que mi voz sea el cántico
Que estremezca su latir, mi mirada el
Espejo donde se refleje feliz, mi cuerpo
Su devoción, su musa, su inspiración.
¿Sabes?, la quiero cual destino,
La necesito cual aire que respiro, cual
Agua para saciar mi sed y también
Para embellecer mi vergel.
Déjame ser su virtud y su coraje,
Su pasión y su hombre, su verdad y
Aquel que nunca de tristeza la haga
Llorar. ’’
Te lo ruego, mi señor.
En el nombre del Padre, del
Hijo y del Espíritu Santo, amén.
Espero ser oído, me despido…