Seré Tu Eterno Enamorado

La buscaba desde siempre.

Sin pensarlo no sabía que a mi lado
Se encontraba, ella era la que en todo momento me
Apoyaba y lo hacía con cada palabra de su
Corazón encantado.

Con su presencia me llenaba, de a poco con su amor
Impregnaba mis sentidos, era ése el que igual yo podía
Sentir y así expresarle con un poema
Lo que crecía dentro de mí.

Recuerdo cada letra plasmada, ellas le decían
Lo mucho que la apreciaba, fue un sentimiento que con
El tiempo se agrandaría para que entonces
Con un te amo unamos
Nuestras vidas.

Aún pienso en esas lágrimas derramadas,
Fueron éstas las que de incontables luceros en una noche
Estaban cayendo, son aquéllas las que de sus
Ojos ya no quisiera ni ver, porque entonces volvería
A mi tristeza, la que viene vacía y
Sin sentido por lo vivido.

Quisiera dejar de ser sólo su sombra.
Que ante ella diga que lucho y más que
Nunca contra esta distancia que parece un castigo,
Es la que de su lado me separa y la que cada noche
Me hace añorarla más y más.

Cada día sueño con tenerla, es que en
Mis pensamientos tengo lo que he vivido, como un
Rico manjar se parecía al poderla probar, para
Que de sus besos su delicia
Me pueda quedar.

Ya me es imposible poderla dejar,
Es que domina lo que siento, así como también
Ha penetrado a mis latidos.

Jamás le dejaré de escribir lo que en
Cada palabra de su eterno enamorado
Siempre podrá leer.

Una Rosa Fugitiva

Cúmulos de sangre brotados,
Pertenecen a una rosa abandonada
Y agobiada por su marchitado dolor
Que la asfixia.

De entre sus pétalos, el rocío le
Invade; son sus lágrimas que sin dudarlo
Derrama, por el odio que a su color
Le cambia.

Su brillo se opaca, ya ni el viento le
Acaricia cuando pasa, hasta ni compañía tiene,
Aunque así lo parezca, pero su latido
Ni la siente.

Sus espinas la hacen intocable,
Como un zorrillo parece cuando es su
Olor el que espanta.

Con su polen a cualquiera atrapa
Y así poder matar, a todo aquel que le
Alcanza.

Posee una tristeza maldecida.

En su deshojo,
Se execra su mismísima
Vida.

La soledad de a poco la
Descuartiza, agoniza y eso que la
Muerte le huye despavorida.

El astro ya ni refleja a su inofensiva sombra.

La reina de la noche ni le da sus de
Bríos, por sus luceros que se atormentan
Al mirar lo que allá abajo habita.

Parece enloquecida,
La pobre delira por su castigo
Que la crucifica.

La mariposa ni la mira,
Es que ni el sonido zumbante de una
Abeja le frecuenta su espíritu.

Su existencia está marcada.

Aunque lo Intenta, su
Descanso eterno no lo encuentra.

Es el destino que ella debe
Seguir y como una rosa fugitiva por
Siempre tendrá que sufrir.

Un Brillo De Confianza

Ahí se avecina una nube, se mira espesa y me trata
De ocultar mi camino en su andar, es frívola y tan
Humedecida que quiere aplacarme con su llanto
Hundido en un sufrir implacable.

En su recorrido me empapa, aunque no decaigo
Y sigo hasta con una venda que
Cubra mis pupilas.

Parece que su agobiante dolor me hace resbalar,
Pero por fortuna una mano me sostiene y
Me ayuda a continuar.

Con su miedo me quiere congelar, hasta de su
Rabia me quiere llenar.

Ella, a mis oídos los intenta tapar,
Como para no escuchar a la voz que
Me logra guiar.

Su pálido color no me limita, ni siquiera los fantasmas
Que a su alrededor desesperan me lo incitan, es que confío y
Lo hago por ese brillo que a lo lejos miro.

Poco a poco, esta sombra se disipa, parece rendir y
Lo hace por su cometido no cumplir.

La lluvia que trajo ha desistido, su cruda tristeza nunca
Me hizo padecer, ya que no dudé, ni mucho
Menos lo he querido hacer.

Claramente, a esa luz ya he podido ver, es la que
Con su mano me sostuvo y con su destello iluminaba
Mi oscuro camino, es la que ahora me acompaña
Y con la que siempre feliz podré estar.

Eres Mi Musa, La Esencia Que Me Gusta

Una melodía lográndome encantar,
Se siente confortable y me hace escucharla
Sin perderle el ritmo.

Su olor me cautiva, es como una
Fragancia delicada, deliciosa y que me deja soñar con
Un mundo sutil y únicamente
Placentero.

Su mirada me hipnotiza, es que su
Poderoso brillo parece magia que destapa
Mis sentidos.

Su piel parece de fantasía, aunque
Me pide tocarla para no pensar que es
Un simple espejismo.

Ella con sus besos me saborea, hasta
Sus caricias terminan por atraerme y así no
Dejarme escapar.

Me lleva por lugares desconocidos y
Con su bello caminar adereza mi mirada que no le
Pierde el paso, ella me hace desvariar, es que
No puedo creer que sea ella la me enamore
Con su dulce cantar.

Ya me es imposible no seguir al sonido de
Su bella voz, es que hasta mi corazón lo tiene y eso es algo
Que a ella ya no le podré quitar nunca más.

La Sombra De Una Muerte

Letras opacadas, esencias borradas,
Sentimientos aplastados, son rasgos de un hombre
Triste y totalmente destrozado.

Se acumula el sufrimiento, es la sombra que se disipa y
Lo Logra cobijar.

Se siente desanimado, él
Dice que su vida no merece ni vivirla.

Se encuentra algo degollado, hasta sus mismos
Sueños retuercen sus sentidos, ellos lo
Envían a su tumba, la que será ocultada en un hoyo
Profundo y sin el retorno concebido.

Su ataúd, lo mira desde lejos y la lápida
Con su nombre, tallado en letras de sangre
Dejada por su inútil desdicha.

Afligido al espejo, mira su rostro demacrado.

Entre éste, sus ojos
Enrojecidos y horrorizados por lo que ahora lo domina, hasta el
Infierno se intimida, es que nunca había visto
Tanto odio en una sola persona.

Hay Árboles disecados, muchas rosas están marchitadas.

Allá está el viento que ondea sus pétalos y hojas resecadas,
Ellas son las que fácilmente una mano puede desgranar.

Ya El Sol no brilla, ya La Luna no refleja su vestigio,
Ya ni las estrellas se miran entre ellas,
Es que no hay luz, la que le daba belleza a esa
Oscuridad con lágrimas entristecidas.

Ya el tiempo se le expira, parece que
Se execra toda su triste vida.

¿Qué le queda por vivir?

¿Qué le toca por hacer?

Qué más ya puede aceptar, cuando la
Muerte para siempre lo logre abrazar.

Ángel De Amor

Desde el rincón vacío de un balcón,
Allí se encuentra un alma pensante y
Muy tímida entre su único deseo
De demostrar a ese alguien lo que siente.

Sus ojos brillan, es como un destello de luz
Inundado en eterna obscuridad, se le nota
Una lágrima solitaria y le recorre por
Cada ilusión que quiere entregar.

El miedo le invade, ya que el temor le
Revolotea como una mariposa que
Busca el polen.

Dentro de él, se encuentra su latido
En constante acelero y una esperanza
Que llega diciéndole
Que su soledad será opacada.

Anda titubeante, aunque el sonido silencioso
De un grillo le dice que no claudique en su
Empeño por querer conquistar
Lo que ha soñado.

Ahora, una nota llega desde el viento que dice:
''ven a buscarme, no te detengas
Y alcánzame.

Toma mi mano,
Que la voy a aceptar''.

El cielo ilumina su andar, hasta le marca
El camino perfectamente
Para no resbalar.

Ya se le nota apresurado, ha visto a su
Ángel llamándolo incesantemente.

Le dice que no le pierda el paso o sino
Perderá a sus alas necesitadas
Por su amor.

Él corre velozmente, hasta que al fin
Logra llegar a ella, arrodillado y con su mano
Extendida le pide ser su Ángel de amor,
Ella gustosa acepta y entre el regocijo de sus alas
Con un beso para siempre
Unidos van a quedar.

Todo Tu Amor

Destellos de un Sol reluciente y ocultado.

De entre muchas nubes, sus rayos
Penetraban y lo hacían, admirando
Cada beso tuyo que llegaba desde el alma, ellos me llenaron, hasta hicieron
Que mi corazón brinque con pálpitos de emoción.

El mar junto con toda su tranquilidad, él fue digno con
Tu bello mirar, hasta le dio mucha elegancia a nuestro único atardecer.

Tus palabras, me las me expresaste con ilusión.

Mientras que tu calor cubría mi oscurecido vestir,
Hasta me diste todo ese amor que es dulce y con sabor a dulce miel.

La sabana, nos cubre y lo hace para cuidarnos
Del dolor, ella es la sombra del olvido y la que siempre
Intenta dejar sin vida a una pasión.

La lluvia, en ese momento atacaba, pero ella con nuestros
Abrazos se aplacaba.

Yo te puedo ver la sinceridad, ella te brota y haces
Que hasta un ciego sienta tu dicha privilegiada.

Tu dulzura ya me invade, es como enseñarme cada sentimiento y
Que además me demuestras en todo momento.

Ya no te dejaré, es que por siempre estaré y para ser todo tu amor.

Dedicado A Mi Novia.

Te Amo.

Déjame Decir Lo Que Siento

Déjame decirte, que quisiera entregarte toda mi vida, es para que con ella vivas y siempre sepas que contigo hasta viviendo estaría.
Quisiera regalarte mi corazón y sus latidos, sería como darte cada sentimiento mío, es para que con esto sepas lo feliz que a tu lado yo me encontraría.
Ya hay muchas Lágrimas de amor descendiendo de mi mirar, es por la razón de saber que te tengo abrazada y justo donde quiero que tú estés.
La noche que se ha llenado con un tremendo júbilo, hasta las estrellas se encuentran celebrando por nuestro único y verdadero gozo.
Ya no existe ni la distancia, hasta se puede ver al mismo Sol que ya ha alcanzado a la Luna.
Las aves engalanándonos con su dulce canto, ellas nos anuncian la llegada de un paisaje digno de admirar.
Las flores con su rocío espectacular, ése fue el adorno deseado para que en aquella noche te pudiera ofrecer un lindo regalo para detallarte mi amor.
El viento nos ondea con su pasar, ése que se llena de regocijo al sentir la pureza de nuestro olor, el que en cada lugar podemos impregnar y así encerrar a la misma tristeza en un calabozo sin salida hacia la luz.
Ya se ha borrado un temor.
Ya se ha borrado hasta nuestra tormentosa desesperación.
Ya un sentimiento nos domina y es ése el que nos cobija con su manto cálido y muy colorido en todo su esplendor.
Por tu felicidad daría mi sangre, para así no opacártela con dolor.
Por tu felicidad hasta lo que no tengo buscaría, es para no verte llorar.
Por tu felicidad hasta al infierno vendería mi alma y eso lo haría si por algún motivo tu corazón yo llego a romper.
No quisiera que nada te faltara, hasta desearía poder llevarte para el mismísimo cielo si con eso logro por siempre verte sonreír.

Reflejo De Tristeza

La lluvia que desahoga su dolor,
alguien dice ser como ella, triste y melancólica
en cada gota de incesante llover.

El ave del plumaje negro oscurecido,
entre su profundo color se encuentra la penumbra
marcada por cada canto del olvido.

Las premoniciones ahora deambulan,
parece que las cartas están
barajando al destino.


Crueles intenciones asomadas,
dichosas y ansiosas por saber cuál es la sombra perturbada,
desde allí una creencia está despedazada,
es como un sueño desgarrado y que se
encuentra en mil pedazos.


Solitarias se encuentran las miradas,
ellas se ocultan de su propia desgracia, ya ni ven a nadie,
ni siquiera sienten al corazón con sus latidos.


Se puede escuchar al funeral desde el mundo
paralelo, hasta parece que la muerte
ha venido moviendo sus hilos.


Hay una tonada triste, amarga y desamorosa,
al parecer su cantante está despechado y hundido
con su botella alcoholizada.


Se logra ver a un retrato desdichado y que además
ha sido trazado a cuarzo casi borrado, es débil y le
muestra al mundo una vida plasmada junto con
un recuerdo doloroso.


Benévolos han sido muchos pasares,
son los que se ven tenebrosos y tan elocuentes
como el que ha estado inundado y siempre estará opacado
con su reflejo de tristeza.

Eres Sólo Un Reflejo.

Destierro

Pensamiento que aturde a mi cerebro, parece que la tristeza regresa a su puesto, ésa que viene desde la nada retorciendo mi destino, el que se escribe alegre y sin temor hacia a una utopía llena de odio sin tener un desconsuelo.
Siento que mi sangre arde, parece que el corazón grita pidiendo por su auxilio.
Mis pupilas que se dilatan, se opacan y con mis lágrimas alertándome por lo inútil de otro fracaso, ellas recorren mis mejillas y se dejan caer por un pozo sin fondo y sombrío en su vacío.
Ya no sé si me pueda refugiar, hasta la oscuridad no me quiere resguardar, es que me huye, ni su sombra me quiere dejar.
Mi voz parece enmudecida, es que ni gritando me logran escuchar.
Aunque ellos me pueden ver y lo hacen para sólo reír.
Ya no quieren saber lo que digo, parece que sus carcajadas les tapan sus oídos.
No les entiendo el agite, yo no le encuentro siquiera el chiste.
Tampoco parezco un payaso, ni mucho menos ese mimo que anda enloquecido.
Parece que huele a mi desgracia, ella es repugnante y se asoma sin titubeos como algo que obstaculiza.
¿Por qué no te borras?
Esto parece una mancha que se lava y siempre queda, es como tonto y hasta parece muy tormentoso.
Ya no me deja tranquilo, esto es como un destierro que me sigue como castigo.
Ya no lo resisto.
Ya no lo aguanto.
Ya no lo soporto.
Creo que me dejaré llevar por esto que será por siempre mi maldecido crucifijo.

El Mejor Día De Nuestra Vida

Tenerte en mi cobijo, fue como haber estado en el cielo, es algo así como obtener un anhelo deseado, ése que se logra después de haberlo añorado tanto.
Para ese entonces, sentí cada latido de tu corazón, ése que me reflejó en tus ojos y que me dio a entender que sí soy el único al que tu pálpito emocionado podía y sólo podrá ver.
Recuerdo que sentí tu aliento en mis labios, cuando eso me hacías delirar de una manera que no aguantaba las ganas que tenía de besar tu boca.
Recuerdo cuando en una primera ocasión te besé, en ese momento me trasladé y aún hoy lo volví a hacer por ese bello lugar donde tú y yo pudimos estar.

No olvido a mis manos, ellas recorrieron tu linda piel para así hacerte sentir amada y siempre especial para mí.
La verdad no te quería separar de mi regazo, necesitaba mucho de tu calor, había frío y cada vez que te alejabas de mí, me sentía tan vacío como aquel que dice vivir en una vida sin sentido.
Puedo decir que al fin disfrutamos de un atardecer juntos, éste estaba oculto aunque poseía un esplendoroso océano, único en su bullir y aunque las nubes tapaban al Sol, éste no le fue un impedimento para que con su brillo le de hermosura a un paisaje que tú inmortalizaste con una fotografía que te dice y dirá que no viviste en un sueño.
Antes de eso, tenía mucho desespero, es que la tristeza me estaba llenando con su dolor, hasta nuestras melodías se borraban y casi olvidaban, parecía que la distancia nos golpeaba duro para separarnos.
Aunque no fue así, ya que en su juego salimos victoriosos, es que después de tanto tiempo mis ojos te volvían a ver, para que en ellos te reflejes y sepas que igual el latido de mi corazón te puede ver nada más a ti.
No sabes lo vivo que me sentí, hasta recordé a aquella ave mitológica, ésa que al morir resurge de sus cenizas feliz y sin nada a qué temer, es que te acompañé y lo hice hasta el último momento en que juntos pudimos compartir tan dichoso amor.
Fueron momentos de mucha alegría que pudimos pasar, es como una enseñanza para ese destino que siempre se ha puesto contra nosotros.
No quiero que creas que olvidaré esto, ya que para mí por siempre será el mejor día nuestra vida.

Relato De Un Hombre En Agonía

De temor tras temor, él dijo que pudo ver al cielo queriendo desahogar su dolor.
Mientras que el candelabro lo admiraba en su brillar tan soberbio, muy seguro de sí mismo, aunque por dentro como débil, había mirado a sus velas tristes y casi agonizantes.
Dice que fue como un síntoma de su silencio que se avecinaba, algo así como un búho que con su canto alertaba a su próxima víctima.
Observó a las cóleras que se iban y lo hacían danzar en su único bailar.
Por ahí se miraba él, como un borracho que bailaba enloquecido, despechado y con un sólo sentido.
Pareció que también vio a su camino marcado, hasta pensó que ése era su futuro bien escrito.
Sus señales las veía pintadas, aunque casi opacadas y ocultas detrás del mismísimo olvido.
El alcohólico antes de irse, relataba que en ese sueño se le reflejó a su cuerpo sin vida, éste olía mal y hasta estaba descompuesto por el tiempo que fue cruel al no darle ni un respiro.
También contaba sobre unos lobos aullando, decía que ellos notaron a la noche iluminada con su luna temerosa y calculadora en su propio brillo.
Decía ver.
¡Él Decía Ver!... A muchas lágrimas petrificadas, notó demasiadas gárgolas llorando por su exilio.
Ahora dijo recordar lo que le contó aquel majestuoso Árbol, él le decía ser fuerte y muy orgulloso, pero al verle sus hojas ya caídas, le pudo denotar a su pobre fragilidad.
Allá se miraba al poderoso Sol intentando llenar a la oscuridad, pero al ver que no podía hacerlo, lo sintió inútil y casi desvanecido, es que la sombra nunca faltaba, ya que sirvió como un refugio para el que se encontraba muy mal herido.
Al corazón que vio derramando su sangre, era fría, dolorosa y hasta parecía a ésa que humillaron por un sentimiento mal infundido.
Ya hay odio.
Ya hay demasiado dolor.
Esas fueron las palabras que en el delirio de su relato hizo saber.

Por desgracia eso lo logró decir antes de que lo encontraran en un Bosque tirado y con el revoloteo de muchas hojas secas sobre su cuerpo gastando el último aliento de su vida innundada con lágrimas de tanto sufrir.