El agua del mar te supo
Danzar, cuando la suave y delicada
Brisa solía pasar.
Era algo que a mi alma podía
Calmar, mientras te pintaba el paisaje
Que te quise y deseo regalar.
¿Recuerdas a la lluvia de aquel
Atardecer donde te abracé?, allí un Ángel
Buscaba una cobija para poderse
Proteger.
¿Y la noche asistida por ese
Brillante querubín?, éste me ayudaba
Para hacerte sonreír, donde con un
Beso me atabas a tu latir.
No creas que olvido al corto paseo
Allá en la calle de nombre desconocido,
Prodigioso momento donde tu mano y la
Mía se unieron y así protegernos.
En ese entonces sentirte fue
Mi alegría, única como la luz que iluminó
Ese mismo día, para darle vida a una
Hermosa fantasía.
Ya nada podía destruirla, ni mucho
Menos extinguirla, por aquello que aquí
Cita: ‘’el Sol es la flama que ni un
Diluvio apagaría’’
Después que te marchaste,
La misma felicidad me hacia soñarte, era
En un mundo donde pude por siempre
Amarte y nadie de ti separarme.
Por último no dejaba de pensarte,
Necesitaba volver a besarte, para no parar
De acariciarte y con el calor de mi cuerpo
Acurrucarte.
Por eso te fui a buscar, cosa que
Pude lograr y así desde mi verso recordar,
Esa vez que en un Bosque a tu lado
Logré pasear y a una cascada admirar, para
Nunca más ese momento olvidar.
Danzar, cuando la suave y delicada
Brisa solía pasar.
Era algo que a mi alma podía
Calmar, mientras te pintaba el paisaje
Que te quise y deseo regalar.
¿Recuerdas a la lluvia de aquel
Atardecer donde te abracé?, allí un Ángel
Buscaba una cobija para poderse
Proteger.
¿Y la noche asistida por ese
Brillante querubín?, éste me ayudaba
Para hacerte sonreír, donde con un
Beso me atabas a tu latir.
No creas que olvido al corto paseo
Allá en la calle de nombre desconocido,
Prodigioso momento donde tu mano y la
Mía se unieron y así protegernos.
En ese entonces sentirte fue
Mi alegría, única como la luz que iluminó
Ese mismo día, para darle vida a una
Hermosa fantasía.
Ya nada podía destruirla, ni mucho
Menos extinguirla, por aquello que aquí
Cita: ‘’el Sol es la flama que ni un
Diluvio apagaría’’
Después que te marchaste,
La misma felicidad me hacia soñarte, era
En un mundo donde pude por siempre
Amarte y nadie de ti separarme.
Por último no dejaba de pensarte,
Necesitaba volver a besarte, para no parar
De acariciarte y con el calor de mi cuerpo
Acurrucarte.
Por eso te fui a buscar, cosa que
Pude lograr y así desde mi verso recordar,
Esa vez que en un Bosque a tu lado
Logré pasear y a una cascada admirar, para
Nunca más ese momento olvidar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario