La suerte mía como hombre, es la de poder tener el amor de un ser capaz de amarme por siempre, una unión que puede constituir toda una vida o simplemente tener la mala suerte de encontrarme una clase de amor que en la vida es fugaz, éste que al desaparecer deja estelas de soledad y mucha tristeza.
Fue aquel amor que me ha provocado incontables lágrimas de sufrimiento sin final, ésas que he derramado a causa de tanto dolor que mi corazón aún siente.
Muchas son las noches que he pasado hundido en el alcohol, triste despechar que el sentimiento pasajero de aquella persona me dejó.
A mi vida han llegado muchas pasiones, pero sólo una destrozó toda ilusión que este corazón podía tener, esas ilusiones que llegaron a iluminar un camino sombrío y sin esperanza alguna, esos caminos que se fueron desapareciendo al saber que a mi vida otro amor, que pensé era eterno, se largó y dejándome en el abandono total sin esa esperanza que alguna vez creí tener.
No hay comentarios:
Publicar un comentario